En esta ocasión voy a hablar de una festividad que en próximos días se celebra, este es el “año nuevo”. Nosotros, los que creemos en el monoteísmo, este año lo vamos a celebrar la noche del 15 de septiembre. Muchos qué todavía no se familiarizan con el tema se preguntarán ¿por qué este día?, bueno, pues en este día, hace 5783 años, Dios, Bendito es Él, creo al ser humano. Pero esta es otra historia porque yo quiero que podamos hablar de este tema en base al razonamiento humano, sin libros ni estudiosos, solo nuestra mente.
Todos tenemos el conocimiento de que termina un año y comienza otro, que es un tiempo de cambio, pero ¿en qué momento cambia?; sigo teniendo las mismas cosas, la misma economía, sigo siendo yo, el tiempo sigue corriendo, entonces ¿qué fue lo que cambió?, ¿realmente termina un tiempo y comienza otro?, yo veo que el tiempo sigue.
Amigos, yo creo que esto nos enseña que, tal vez si hay ciclos, pero el que culmine un ciclo y comience otro no significa que habrá un cambio. Podrán pasar muchos ciclos pero nosotros seguir siendo los mismos. La ciencia de la física nos enseña que para haber un cambio en la materia, necesita haber una acción ajena a esta para que se genere ese cambio, la piedra seguirá en el camino hasta que llegue alguien o algo y la mueva, el terreno seguirá siendo llano hasta que llegue alguien y construya, el árbol seguirá estando ahí hazte que alguien lo corte o tal vez la misma naturaleza lo tire, yo seguiré siendo el mismo hasta que me llegue la voluntad de querer cambiar y aplique la acción necesaria que me haga generar ese cambio. Entonces, ¿qué es mejor, que el año sea nuevo o que yo sea nuevo?. Mmm, interesante pregunta…
Otra cosa que podemos ver es que el tiempo y la naturaleza se están renovando constantemente, cada día que pasa, cada hora, cada segundo y aquí me surge otra pregunta: ¿nosotros estamos en esa constante renovación?. He escuchado decir a muchas personas que la naturaleza es perfecta, que los tiempos son perfectos y bueno, con mi razonamiento, llegué al siguiente pensamiento: para yo poder aspirar a la perfección necesito mantenerme en esa constante renovación cada día, cada hora, cada segundo. Y aquí me llega otro pensamiento hablando a nivel social y es este: “Podrá haber buenos políticos, podrá haber buenos sistemas, pero si la sociedad no tiene la voluntad de renovarse y cambiar, ningún país va a cambiar”.
Los dejo con la siguiente reflexión: Los ciclos son de quien los quiere tomar, pero para tomarlos, se tiene que tener la voluntad de quererse renovar constantemente para que estos ciclos contribuyan a un cambio positivo.
Les deseo que Él Eterno, Bendito es Él, los bendiga de todo lo bueno y lo mejor.
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